Paz y bien.
He decidido hablar del mundo que nos abruma porque una querida amiga cuando me conoció me dijo eso en un mensaje del facebook, creía que podría encontrar en mis escritos alguna receta para combatir esa bruma.
Estaba viendo de qué hablarte y se me han ido pasando los días. El otro día, mientras que esperaba a una amiga con la que había quedado para conversar de nuestros proyectos vitales, frente a un té empecé a escribir algo que en ese momento consideraba importante. Mi ego sobre todo así lo valoraba: la confianza.
Me escribí el post casi enterito. Lo leía y estaba presente el estilo del maestro-gurú. Es lo que me sale. Bueno. Hablando con Isa, bebido ya el té, me dice, <<cariño, sabes que tengo confianza contigo pero el que ha escrito los dos o tres últimos post de mindfulnessdemujer no eras tú>>. Y le dije <<Ah, ¿que se ha notado?>>. Oh my good. Se nota cuando uno tiene la energía en otro sitio o se siente guiado por el personaje y encima se deja en sus manos por cumplir, haciéndome creer que estoy sirviéndote.
Bueno, vuelvo a las andadas de escuchar y escribir sobre lo que te interesa. Uno de mis problemas (en vías de solución) es hacer un planing o programa de post. La «teacher» Laura Ferrera así me lo recomendaba: <<candelariza Corazón>>, cuando me ayudó a construir esta web y blog. Es puro marketing de redes. Yo diría que es de lógica. Muy bien, pero ya le contaba a Isa que soy un ser inspirado y que quiero escuchar a mis lectores. Dar respuesta a sus inquietudes. El problema surge cuando no hay «Comentarios». Como buen hombre (dominado por el ego) decido lo que tú como mujer necesitas o te conviene. Y así me va.
Me ha parecido curioso que mientras escribo este post recibo un mensaje de otro artículo escrito por una amiga psicóloga, Ana Hidalgo, que impacta ya con el titular y que da otras armas hacer que cambie UN DIA DE MIERDA, o lo que yo he titulado BRUMOSO o mundo ABRUMADOR (porque eso de ser poeta a veces chirría con estos titulares tan contundentes, a la par que prácticos y al grano). Este es el enlace por si te quieres ilustrar más es más que complementario con este que lees>>>: Cómo cambiar un día de mierda.
No sabía que si soy un peñazo escribiendo, si escribo desde la cabeza, entono el «me culpa»; si te digo lo que tienes que hacer, la respuesta consciente o inconsciente es mandarme a …(aquí puedo oír dentro ese PÍIIIIIIIIII, jejejejemmm), y si eres compasiva me dirás <<¿de qué vas muchacho, de salvador? ¡venga ya, paso de ti!>>. Oéoeoeoé…he conseguido cargarme la incipiente confianza que tenías en mí.
Pero como te he dicho hoy no toca hablar de confianza. Me ha interesado eso que me decía Cecy del mundo que abruma. Creo que ya te conté que me eduqué en el catolicismo como casi todos los españoles e hispano-parlantes. Me vino a la memoria eso del catecismo de Ripalda, creo, que hablaba de los enemigos del alma: el mundo, el demonio y la carne. Esto inconscientemente está muy arraigado en nosotros, espero que no en nuestro ADN.
Mi querida amiga dice que soy muy espiritual. Debe ser que por eso conecto con ella y tantas personas que buscan a un modelo que no es de este mundo. Yo antes me mosqueaba, porque a carnal me ganan pocos. La imagen de mi mirada en las fotos de los «perfiles» en las redes sociales o mis performances poético espirituales deben tener un halo, un aura, una energía trans.
Lo que yo he aprendido y vivido que esa película que nos venden de lo chungo que es el mundo para los que somos o queremos ser espirituales, es eso, una película sin sentido. El zen te habla de bajar al mercado, san Francisco nos canta a las creaturas, la creación, que me parece está en este mundo. ¿Es chungo o lo percibimos chunguete?
El que creamos que hay dos mundos y que quieres salir de uno (supuestamente malo) para entrar en otro (divino) bien porque te sientes llamado a Él, bien porque te sientes nada, o mejor dicho «víctima» de la humanidad (en su lado oscuro que dirían los de Star Wars» que sacan por estas fechas el nuevo trailer de la peli) y piensas que eso espiritual es un confortable prado donde los ángeles te van a cuidar, alejado del mundanal ruido…podemos considerarlo como problema. El caso es que ese mundo que te abruma, te llena de nubes espesas y oscuras, te ataca, hay que hacer algo con él.
Mi querida Cecy me pide tips que le ayuden. Me ha venido otra vez la tentación de supergurú al rescate. Pero me he dicho <<MuAC (ahora me dialogo así, antes era miguelín y otras veces miguel o miguel ángel) ¿te acuerdas de lo que has hecho tú cuando has tenido esa tesitura de vida?>>. Lo de tesitura de vida es muy poético y sustituye a el actual «marrón».
Esto no sé si es mindfulness o psicología de qué rama pero a mi me funciona. Cada mañana me considero un rayo de sol. Yo no hago como recomienda la santa madre Iglesia combatir la seducción del mundo, es una guerra generalmente perdida. Me dedico a cantar o poner alguna canción que me pone las pilas y me conecta a la luz. Espero que no me consideres un friki, pero como me gusta la música de los ochenta del S.XX me canto, y más si estoy enamorado, eso de Steve Wonder «you are the sunshine of my life» o lo que es lo mismo «eres un rayo de sol en mi vida». Que creo que es lo que me quería decir mi amiga y amada Cecy.
Las brumas se van con la luz, el desarrollo personal o transpersonal consiste en eso, dar luz a las sombras, iluminar el mundo. Creo que Jesucristo también lo decía en el Evangelio de Mateo, capítulo 5, versículos…
14.Ustedes son la luz del mundo: ¿cómo se puede esconder una ciudad asentada sobre un monte?
15.Nadie enciende una lámpara para taparla con un cajón; la ponen más bien sobre un candelero, y alumbra a todos los que están en la casa.
16.Hagan, pues, que brille su luz ante los hombres; que vean estas buenas obras, y por ello den gloria al Padre de ustedes que está en los Cielos.
Espero que no os moleste esta cita, por ser de quienes hablan del mundo como algo a combatir (curiosamente la Institución, no su inspirador). ¿Cómo dejas de estar abrumado por el mundo? ¡Brillando!
Bueno, vamos avanzando, uno puede cantar a Steve Wonder u otro cantante o canción de estos estilos para ponerse las pilas que encienda la luz(rock ¿por qué no? y si no que se lo pregunten al Pirata y su Banda en su programa de radio de todas las mañanas) y meditar en este texto evangélico que es más espiritual. Y a la vez muy de bajar al mercado porque Jesús no te invita a irte al templo, esta vez, te dice todo lo contrario. Y eso sí que te aseguro que disuelve las brumas y el abrumamiento del mundo.
Si eres más de cantar mantras, he de agradecer a mi otra amadísima amiga Marcela el regalo que me hizo hace algunos meses, puedes alimentar esa luz que eres y esa luz que emanas cantando o recitándote (recomendablemente escuchándote o susurrándote) un mantra con la versión, por ejemplo de Snatam Kaur «I´am the light». Si quieres practica ahora.
http://www.youtube.com/watch?v=UjuzK44rcSU
El siguiente tip que te voy a comentar sería una explicación del texto evangélico que hemos puesto más arriba. Cariño ¡haz el amor con el mundo! Como soy un impúdico te lo voy a decir más claro: ¡déjate penetrar por él y vierte en él lo mejor de ti!
Me acuerdo aquí de esa canción de Pedro Guerra en boca de Ana Belén «Contaminame«. Nosotros no somos un profiláctico, ni una legión romana avanzando con sus escudos en perfecta formación defensiva. Amar es dar, es arriesgarse a ser herido, si sigo con la espiritualidad occidental aquí me tocaría poner lo que decía el buen Pablo de Tarso a los Corintios sobre cómo hacer el amor al mundo. Si quieres leer más en: http://www.bibliacatolica.com.br/biblia-latinoamericana/1-carta-a-los-corintios/13/#ixzz2cPVcjuit
pero esta vez me quedo con Lao Tsé porque al otro lado del mundo nos decía esto que yo procuro estar atento y llevarlo a cabo:
“El deber sin amor vuelve malhumorado.
La responsabilidad sin amor vuelve desconsiderado.
La justicia sin amor vuelve rígido.
La verdad sin amor vuelve acusador.
La educación sin amor vuelve contradictorio.
La inteligencia sin amor vuelve astuto.
La amabilidad sin amor vuelve hipócrita.
El orden sin amor vuelve violento.
El honor sin amor vuelve arrogante.
Las posesiones sin amor vuelven avaro.
La fe sin amor vuelve fanático.”
Y esto sí que es una manera de ser feliz e iluminar ese supuesto mundo «de mierda» del que hablan algunos o el que nos creamos nosotros consciente o inconscientemente en nuestro día, pensando que hay otro mundo en otro lado. Le escribía a Cecy ayer, <<Corazón si crees que yo soy espiritual y tú eres terrenal te voy a dedicar este poema para que nos entendamos>>:
Creo que me estoy extendiendo mucho pero voy con la última vivencia de mis años mozos y que también me ha ayudado con la crisis de los cuarenta, no hace mucho.
Entiendo eso de que abrume, acogote, anonade, ataque… el mundo. O al menos esa experiencia de sentirse con la espada de Damocles permanentemente sobre la cabeza. Y digo «cabeza» con todas las letras porque eso no pasa si estás y vives en el mundo desde otro sitio (desde el alma). Ese otro sitio del que hablo tanto a mis lectores y clientes cuando en mi nuevo trabajo como Mentor, de gente que quiere escribir (o escribe ya), les hago reconocer que están con miedo, bloqueados o saboteados… y están en un «quiero y no puedo» porque la mente-ego les hace estar ahí y no en otro sitio más creativo, incondicionado e incondicional.
Uno de los motivos por los que me salí de fraile en mi juventud fue porque la crisis me hacía sentirme vacío. Los problemas me abrumaban, el mundo. Que yo asociaba a «afuera de mí». Y obviaba mi mundo interior, mi mente, mi ego que era el que realmente me estaba fastidiando. Lo sé porque durante bastante tiempo seguí igual, sintiendo lo mismo, siendo un ciudadano estudiante y trabajador más.
Yo en plan muy trascendental digo que me salvó la escritura. En mi caso la poesía. No soy de diarios, que le vamos a hacer. Cuando me pongo pasado un periodo de tiempo lo dejo. Como decía, escribí un libro de poemas «Suicidamente vacío». Poner sobre un papel o una pantalla, o sobre la arena, da igual, eso que piensas, sientes que es un peso ayuda a desinflar su volumen. En aquellos tiempos post-adolescentes llegué a pensar en el suicidio porque no podía más, me había puesto el disfraz del mundo y era una mierda elevada al cubo.
Pero esto que a la gente a veces le da pena, o con lo que te sientes identificado se supera mediante la poesía o la escritura. No pasa nada si te dedicas a la escritura terapéutica, es tan digna como el bet-seller. Puedes escribir desde el alma, creo que en otros post ya te he puesto un enlace con el regalo de un ebook que da unos secretos que te pueden ayudar.
Pero una vez metida la cuña publicitaria lo que sí quiero dejar claro que lo que a mi me ha servido es posible que te valga o no. Lo bueno es que te puede servir de inspiración para que encuentres tus soluciones o tires de un terapeuta, coach o mentor para sentirte acompañada en la resolución de lo que te abruma.
No he hablado de apostar por dedicar unos minutos diariamente a la meditación pero es lo que va a sostener esa luz, lo que te va a hacer proactiva, dejarás de soportar el mundo para aportar al mundo. Este poema surge en una meditación, donde la mente no la dejo en blanco, con el sol por mi espalda, entrando a través del ventanal en el zendo. Gracias y hasta otro «Comentario», si quieres.
El sol a mi espalda proyecta mi sombra,
La opacidad que no mengua en su contorno,
Con afiladas lindes, cae al trasluz.
Siento un escozor y calor en mi espalda.
Me doy la vuelta, la luz quema, ciega,
Y la sombra sigue por mi espalda, tibia,
Extendida, tan tranquila y un tanto oscura
Esperando, sin ver, a que la ilumine
Con mi mirada, con atención amable.